La mitad de las personitas bíblicas tienen nombre con a.
Adán, Abraham, Absalón, Abel, Ananías y etcétera etcétera etcétera. Mi favorito del día es Amnón. Amnón, hijo de David (ese que mató a Goliat con una piedrita), está caliente muy caliente por Tamar. Tamar es su hermana. Pero lo de ser hermana no es el problema. Amnón cree que es difícil tirársela porque la chiquilla es virgen (y una virgen de la biblia es MUY MUY virgen). Pero A. no contaba con la astucia de un buen amigo: Jonadab. Jonadab le dice que se haga el enfermo, el pobrecito, en su cama, muy acostado y así Tamar, como buena hermana, vaya y lo cuide. Y bueno. Se hace el enfermo. Tamar lo cuida. Cocina hojuelas delante de él. Amnón quiere que se las de en la boca. Tamar las pone en su manito y se acerca. La agarra y le dice: "Ven, hermana mía, acuéstate conmigo", Ella le dice que no, que qué feo, que la deshonra, que le diga a David que se la quiere follar y que así consentimiento del padre, las cosas en orden y todos felices. Pero él no y no. Se la culea bien culeada. Bien violada. Después le da asco. La Biblia dice así: "Luego la aborreció Amnón con tan gran aborrecimiento, que el odio con que la aborreció fue mayor que el amor con que la había amado". Entonces la echa de patitas a la calle. Ella grita, rasga sus vestidos y se pone ceniza en la cabeza y todas esas cosas que la gente bíblica sufriente hace. Fin.
(por jovenyalocada)